¿Cuáles son los beneficios del Omega-3 en nuestro cuerpo?

El grupo de ácidos Omega-3 es un conjunto de ácidos grasos que no son producidos por nuestro cuerpo de forma autóctona sino que deben ser incorporados mediante la alimentación a nuestro organismo. Estos ácidos son muy beneficiosos para las células, lo que mejora notablemente algunos de nuestros procesos fisiológicos. Existen varios tipo de ácidos Omega-3 como el ácido eicosapentanóico (EPA), el ácido alfalenoico (ALA) y el ácido docosahexanoico (DHA).

Se pueden encontrar en productos vegetales como el aceite de soja, el aceite de oliva, el aguacate, los cacahuetes, las nueces, las semillas de chía o las semillas de linaza, pero, también se encuentran en varios mariscos y pescados azules como el salmón, el jurel, el atún, el arenque, la caballa, y como no, en nuestra queridísima sardina.

Se recomienda consumir entre un 0,1 y un 1% de estos ácidos del aporte energético diario, lo que supondría unos 1600 mg/día en varones adultos y unos 1100 mg/día en mujeres adultas, excepto en el caso de mujeres embarazadas donde la dosis debería incrementarse hasta los 1400 mg/día, ya que el Omega-3 es fundamental para el desarrollo del feto.

Esta cantidad se puede obtener consumiendo una porción de pescado dos o tres veces a la semana o con diferentes aceites y productos de origen vegetal. Además, podemos obtener Omega-3 de diferentes alimentos fortificados como bebidas de soja, marcas de huevos especiales, leche o yogures; como también de diversos suplementos dietéticos como el aceite de alga, el aceite de krill o el aceite de hígado de bacalao.

Y es que, introducir Omega-3 en nuestra dieta es muy importante ya que nos aporta numerosas ventajas:

• Ayuda a disminuir el colesterol malo (LDL) y controla los triglicéridos.
• Contribuye a la regulación sanguínea, ya que mejora la presión arterial y el rendimiento de nuestro corazón. Esto favorece la prevención de enfermedades cardiovasculares como la insuficiencia cardiaca, la ateroesclerosis y la trombosis.
• Es imprescindible para construir, mantener y reparar membranas celulares de nuestro organismo, en especial las que se encuentran en la retina y el cerebro. El cerebro esta compuesto en gran parte de este tipo de grasas tipo omega por lo que un déficit de éstas puede causar angustia, depresión y pérdida de memoria.
• Reduce el nivel de estrés, y es un gran aliado para lidiar con la depresión y el síndrome premenstrual.
• Es muy beneficioso para combatir el asma y diferentes tipos de alergia.
• Disminuye la inflamación y es bueno para contrarrestar los efectos de enfermedades inflamatorias como la artritis o la enfermedad de Crohn.
• Es bueno para perder peso ya que mejora el desarrollo muscular, y, por lo tanto, nuestro estado físico, retrasando así el envejecimiento del cuerpo.
• En el caso de mujeres embarazadas, mejora el desarrollo neurológico del feto y además, reduce los casos de parto prematuro.

Por estas razones, debemos tener una dieta equilibrada en la que los ácidos grasos Omega-3 deben estar presentes ya que nos aportan numerosos beneficios para la salud. Las sardinas, entre otros pescados azules, son una fuente muy rica en Omega-3, además de aportarnos proteínas y minerales imprescindibles como el hierro, el fósforo, el magnesio y el yodo.